miércoles, 1 de julio de 2009

¿Por qué me quieres?



Era un día entre semana y aún estábamos en la universidad lo que significaba que el tiempo nos pertenecía. Quedé con Max para comer en el centro y mientras nos dirigíamos al restaurante, comentábamos cómo nos había ido últimamente.

Solíamos mantener conversaciones ligeras en las que abordábamos nuestras vidas con el humor de quien se reconoce en sus errores y los comparte. Para ejemplo, un botón: Por aquel entonces había descubierto el enorme trabajo que suponía dedicarme al canto profesionalmente a lo que concluí:

– Me falta talento para ser vaga.

– Ada, cariño, tú ya eres vaga –tras unos segundos pensándolo, corregí:

– Pues me falta talento para seguir siéndolo.

Pero aquel día Max estaba muy alterado. Acababa de tener una discusión con su madre en la que quedó patente que él, hijo único, no había cumplido con las expectativas familiares. En su rostro vi la sorpresa y el horror de quien se siente repudiado y por su mente planeó una desoladora conclusión nadie puede quererme.

- ¿Tú me quieres?- la pregunta encerraba un peligroso juego, ¿acaso nuestros padres no son también dioses, cómo romper entonces una de sus maldiciones ? y allí estaba yo con mi desnuda y frágil humanidad.

- Sí- dije asustada. Él no me entendió y extrañado, insistió:

¿Por qué me quieres? –me sentí acorralada. En plena Gran Vía bilbaína, edificios de tres bancos y un centro comercial nos rodeaban y dibujaban algo más que una encrucijada urbana. Sin embargo, la intuición me proporcionó la respuesta que rompería los límites del juego:

- Por tu dinero- dije tranquila y sin darle mayor importancia, como quien señala algo obvio. Él asintió y regresó a sus reflexiones, manteniendo la mirada baja e intentando encajar lo que le había dicho. De repente, arqueó las cejas y con un gesto doloroso se volvió para decirme:

- Pero Ada, yo no tengo dinero- sonreí con picardía y asintiendo concluí:

- Ya lo sé- Max rió a carcajadas y mientras nos abrazábamos, regresó al mundo.

Las Palmas, 1 de julio de 2009