jueves, 19 de agosto de 2010

Sobre Los Deseos

Hacía años que sabía que mi vida no tenía ninguna dirección. No es que no lo supiera antes, sino que no lo había enfrentado.
Hacía las cosas porque podía o porque se me daban bien y una fina línea separaba mi trabajo de lo que me gustaba hacer.
Cada vez que alguien me preguntaba a qué me dedicaba, la respuesta “lo que surja” iba perdiendo fuerza. Así que poco a poco fui haciendo mía la idea de disfrutar con mi trabajo, encontrando algo que alimentara mi alma y me hiciera sentir alegre.
Una vez leí la historia de un médico oriental* que vivía en Nueva York. Alguien fue a su consulta para tratarse unos sudores nocturnos. Después de oír los diferentes episodios, el galeno preguntó:
- ¿Cuál es su finalidad en la vida?
- No lo sé- respondió el paciente.
- No puedo curarle si no sabe cuál es su finalidad.
Esta historia quedó en mi memoria, absurda e imprecisa, hasta que oí la siguiente conclusión a una amiga:
- Cómo me van a salir bien las cosas, si no sé lo que quiero hacer con mi vida.
Un fogonazo iluminó mi interior: sin un objetivo vital mi energía se dispersaba, se entretenía y no se dirigía a ningún sitio en concreto.
Por eso empecé a preguntarme “¿cuál es mi destino?” y un silencio interior me invadía.
Un amigo trató de ayudarme “medita y te vendrá la respuesta”. Pero la respuesta, traspapelada en algún lugar entre mi alma y mi mente, no llegaba.
Fue en una conversación con su compañera de vida sobre cómo había sido el alumbramiento de su hija cuando me llegó. “¡Eso es lo que yo quiero, ser partera!”.
Así de fácil, extraño y mágico, porque se parecía mucho a la forma de hablar que usaba cuando era niña y llegaban las navidades: me paraba en los escaparates de las jugueterías y susurrando “me lo pido” señalaba posibles regalos de reyes.
Estoy aprendiendo a pedir con inocencia y bondad esas cosas que me alegran el corazón y ¿sabéis?, la vida me las va dando.
Las Palmas, 19 de agosto de 2010


* Historia extractada de la autobiografía de Alejandro Jodorowsky.

“Cuando sepas lo que quieres, la vida te lo va a dar” Belén increpando a Ada en una charla, febrero de 2009.

domingo, 8 de agosto de 2010

Mi Mundo

Vivo en un mundo donde las personas no se conocen, sino que se reconocen.

Donde viajar a un sitio no es descubrirlo, sino recordarlo.

Donde lo importante es ser, no aprender.

Donde la tierra se comparte porque no pertenece a nadie.

Donde aparece la escucha activa mientras las opiniones se disuelven.

Donde los niños son maestros intuitivos y los adultos se esfuerzan por conservar su corazón de niño.

Donde el valor esencial eres tú mismo y compartirte el mejor de los regalos.

Donde los aciertos se construyen a partir de un enjambre de errores.

Donde la felicidad respira en nosotros y no puede sernos entregada.

Os lo cuento porque éste es mi mundo y porque amo mi vida.

Las Palmas, 06 de agosto de 2010